Chocolate
El proceso de fabricación:
El chocolate se elabora a
partir de los granos de cacao del árbol de cacao de 4 a 5 m de altura, cuyo
tueste a una temperatura mantenida con precisión libera el incomparable sabor
del cacao. Los granos tostados se separan de la cáscara y se muelen en molinos y
laminadores. La molienda rompe las células de los granos de cacao, lo que libera
la manteca de cacao. La fricción durante la molienda aumenta la temperatura,
haciendo que la manteca de cacao se derrita y combine los fragmentos de células,
almidón y partículas de proteína para formar una masa de cacao marrón brillante
con un fuerte olor a chocolate. Esta masa de cacao puede utilizarse ahora para
hacer cacao en polvo y manteca de cacao o chocolate.
Cacao:
La masa líquida de cacao se llena en cámaras de
presión donde la manteca de cacao se somete a una presión de hasta 900 bar. Un
fluido claro y de color dorado, similar al aceite de girasol, fluye de la prensa
de cacao. La "torta de prensado de cacao" sobrante se corta en trozos pequeños y
se muele para crear el cacao en polvo.
Chocolate:
La
leche, el azúcar y la manteca de cacao o la nata se mezclan con la masa de cacao
para crear chocolate negro (al menos un 50 % de cacao en pasta, sin componentes
de leche) o chocolate con leche (al menos un 25 % de cacao en pasta). Finalmente
molido en varios tambores de acero, la masa de chocolate llega a las
"caracolas". Las caracolas son un sistema de mecanismos de agitación y
frotamiento, que llevan el nombre de su forma original (la conche (francés) =
caracola). Después de varios días de agitación, giro, aireación y cambio de
temperatura ininterrumpidos, se crea una masa líquida y suave que puede
utilizarse para elaborar los mejores chocolates.
Chocolate
blanco:
A diferencia de todos los demás chocolates, el chocolate
blanco no contiene ninguna masa de cacao. Además del azúcar, el chocolate blanco
se constituye de manteca de cacao y la leche en polvo. Debido al alto contenido
de manteca de cacao y leche en polvo, el chocolate blanco tiene una vida útil
más corta que el chocolate negro con un alto contenido de
cacao.